viernes, abril 14, 2006

Oratorio. Pascua.

Bitácora del Navegante. Oratorio.

"Un juicio sin misericordia
para quien misericordia no tuviera.
El que tenga los oídos para oír,
que escuche, por favor, y que comprenda."
El Juicio de Dios, M.Menapace


Cuando pienso en la palabra "Rey", puedo imaginarme los hábitos, el entorno y la residencia del soberano, (dentro la de cultura de que dispongo). Entiendo la palabra "Realeza", como la dignidad propia de los reyes. Cuando pienso en el trato que El se merecía, me averguenzo mucho. Su Realeza no era de este mundo. Era infinitamente, superior. Y me duele mucho más, asomarme e intentar imaginar cuánto merecía y cuánto le negamos -y cuánto lo soportó mansamente-, que todos los latigazos, la tortura o hasta la misma muerte en la Pasión.
Qué difícil era y es comprender Su actitud y Su vida.
"El Padre le había puesto todo en sus manos,
y se puso a lavar los pies de los discípulos"
"...Pedro ama a Jesús y sabe que el Señor también le ama, pero es consciente de la distancia entre ambos. Tanto el amor de Pedro como el de Jesús son entrega, pensar en el otro, querer el bien del otro, pero en Jesús,“el mayor sirve al menor”, hasta el extremo de que Dios sirve al hombre, incluso al hombre sucio por el pecado, es decir, al hombre que no le ama. Esa es la diferencia y a Pedro le cuesta aceptarla; se resiste..."
Cuántas cosas más no entendimos,
y todavía no entendemos!?