martes, enero 03, 2006

Tintas. Entropía.

Bitácora del Navegante. Tintas.

Me muevo a toda velocidad en una atmósfera marciana, de modo tal que aunque corro y me doy prisa sólo avanzo a paso lento.
Así crucé la última pulgada de la última milla del camino anterior, y así dibujo las huellas lentas en el polvo de la superficie.
El esfuerzo es el último que puedo dar, de las fuerzas conocidas.
El traje, el oxígeno y todo el equipo auxiliar están al borde de la fatiga y la extinción.
En el insondable fondo del espíritu humano es donde parece estar la respuesta a situaciones límite.
Cuando las distancias parecen incalculables, el terreno desértico, las capacidades colmadas, los intentos rendidos...
Cuando se alcanza la velocidad de la luz, la masa se vuelve infinita y se colapsa sobre si misma.
Dos universos se acceden, e ir demasiado rápido equivale (o no) a ir demasiado lento, y así, en cada sombra su destello, y a cada luz, la oscuridad.