Descontexto. La vida, ese banquete.
Bitácora del Navegante. Descontexto.
Fue el Jueves pasado. Caminaba hacia una oficina del centro, y decidí visitar un lugar donde venden cosas relacionadas con la religión (cruces, estampas, estatuas etc.). Está en el segundo piso del antiguo edificio. Después de curiosear un rato, me fui con dos libros.
Aquél mismo día empecé con el mas chiquito, de carácter histórico.
El otro, el que más me atraía, me llamó, finalmente, el sábado.
Porque a veces, los libros no se leen; se escuchan.
Quien quiera oir, que oiga... ;)
"Hay alguna manera de definir la vida? En lugar de expresarse con conceptos abstractos, la antigüedad clásica utilizó invariablemente la palabra banquete, el banquete de la vida. Pero, cuál es ese banquete? Quiénes son los que se sientan a esa mesa? El mundo responde que los millonarios, porque el dinero, según los criterios de ese mundo, abre todas las puertas de todos los banquetes.
Sin embargo, es bien sabido que, tras las soberbias mansiones y las fiestas deslumbrantes, se sufre tanta tristeza, tanto vacío… Dónde está ese banquete?
Estamos buscando el sentido de la vida, y diariamente podemos comprobar que infinitos finitos no son capaces de llenar un pozo infinito. En qué dirección caminar para alcanzar con las dos manos el sueño siempre fugitivo del sentido de la vida? Dónde está aquel valor impalpable que da valor a todos los demás valores?
Qué es el hombre? Una llama al viento desprendida del leño, persiguiendo sin cesar quimeras imposibles? Un pobre huérfano perdido en la noche en busca de una brújula? Con frecuencia, el hombre de hoy se parece a aquel peregrino que, como Ulises, se lanza a recorrer el mundo en busca de una llave: la llave del significado. Sucede que este hombre había logrado solucionar todos los problemas socioeconómicos y familiares. Más aún, había obtenido pleno éxito en todas sus empresas; pero de pronto, siente que le falta un sentido por el cual vivir.
Qué hacer, qué receta entregar cuando nos encontramos con un hombre que afirma sentirse dominado por un sentimiento de inutilidad de su vida? Albert Camus dijo en una oportunidad: “Hay un problema verdaderamente serio y es… determinar si vale o no la pena vivir”.
La sociedad moderna tiende a satisfacer virtualmente todas las necesidades, salvo una: la del sentido de la vida. Por eso, el hombre de hoy corre el peligro de caer en el vacío existencial, la mayor de las desgracias, que trae como consecuencia muchas veces, la adicción a las drogas y los alucinógenos, como también al alcoholismo.
En el fondo, cualquiera de estas adicciones no es otra cosa que un intento de fuga, preludio en no pocas ocasiones del suicidio, fuga a cualquier parte o, lo que es lo mismo, a ninguna parte. En el fondo, se trata de regir a toda costa el vacío existencial. Fuga de un vacío a otro vacío.
Así se explica que esta tóxicodependencia se dé preferentemente entre la juventud, porque son ellos, los jóvenes, quienes experimentan más agudamente el desmoronamiento de los valores tradicionales, y quedan a la intemperie, sin saber en qué dirección caminar y qué hacer con su vida. Qué sentido, qué utilidad tiene esta vida?
Necesitamos buscar con urgencia aquel no sé qué por el cual un hombre, en medio de dificultades y sufrimientos, se siente contento y feliz. Qué será?"
Sin embargo, es bien sabido que, tras las soberbias mansiones y las fiestas deslumbrantes, se sufre tanta tristeza, tanto vacío… Dónde está ese banquete?
Estamos buscando el sentido de la vida, y diariamente podemos comprobar que infinitos finitos no son capaces de llenar un pozo infinito. En qué dirección caminar para alcanzar con las dos manos el sueño siempre fugitivo del sentido de la vida? Dónde está aquel valor impalpable que da valor a todos los demás valores?
Qué es el hombre? Una llama al viento desprendida del leño, persiguiendo sin cesar quimeras imposibles? Un pobre huérfano perdido en la noche en busca de una brújula? Con frecuencia, el hombre de hoy se parece a aquel peregrino que, como Ulises, se lanza a recorrer el mundo en busca de una llave: la llave del significado. Sucede que este hombre había logrado solucionar todos los problemas socioeconómicos y familiares. Más aún, había obtenido pleno éxito en todas sus empresas; pero de pronto, siente que le falta un sentido por el cual vivir.
Qué hacer, qué receta entregar cuando nos encontramos con un hombre que afirma sentirse dominado por un sentimiento de inutilidad de su vida? Albert Camus dijo en una oportunidad: “Hay un problema verdaderamente serio y es… determinar si vale o no la pena vivir”.
La sociedad moderna tiende a satisfacer virtualmente todas las necesidades, salvo una: la del sentido de la vida. Por eso, el hombre de hoy corre el peligro de caer en el vacío existencial, la mayor de las desgracias, que trae como consecuencia muchas veces, la adicción a las drogas y los alucinógenos, como también al alcoholismo.
En el fondo, cualquiera de estas adicciones no es otra cosa que un intento de fuga, preludio en no pocas ocasiones del suicidio, fuga a cualquier parte o, lo que es lo mismo, a ninguna parte. En el fondo, se trata de regir a toda costa el vacío existencial. Fuga de un vacío a otro vacío.
Así se explica que esta tóxicodependencia se dé preferentemente entre la juventud, porque son ellos, los jóvenes, quienes experimentan más agudamente el desmoronamiento de los valores tradicionales, y quedan a la intemperie, sin saber en qué dirección caminar y qué hacer con su vida. Qué sentido, qué utilidad tiene esta vida?
Necesitamos buscar con urgencia aquel no sé qué por el cual un hombre, en medio de dificultades y sufrimientos, se siente contento y feliz. Qué será?"
El sentido de la vida, (Introducción, Banquete)
Ignacio Larrañaga (Sí, el mismo autor de El Pobre de Asís...)
La última cena, D. Bouts.
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