martes, octubre 05, 2004

Serrat: La muerte del Abuelo

Bitácora del Navegante. Bodega

No hay risas, sólo hay llantos.
No se oyen canciones, sólo gemidos.
Todo parece estar de luto
en este rincón marinero.

En la taberna, los pescadores
han enmudecido, no dicen nada,
y las comadres, en la iglesia,
ruegan por el abuelo.

Todos irán a su entierro,
todos dirán: «¡qué bueno era!»
Todos sabrán cómo hablar bien de él,
quizás alguno llorará de pena.

Pero no por amor, porque, al viejo
amor tan sólo le dieron
la barca, el cielo, los aparejos,
la red, el viento y el azul del mar...

Al día siguiente todo habrá cambiado,
porque nadie piensa ya en el viejo.
Los pescadores se han hecho a la mar,
los chiquillos juegan por la calle.

Pero en la playa, tan concurrida ayer,
sólo queda una barca
con una red que ya nunca más
volverá a besar el mar.

No volverá a besar el mar
nunca más.

La mort de l'avi, J.M.Serrat, 1965.

Faltan algunos días para que se cumpla según el calendario, cierto número de días,desde que mi papá no está en esta orilla.
Si Joan me permite, su mar es mi río, y el abuelo es papá. Y a él mis abrazos y mis besos.
Ojalá navegues por aguas de cielo, hacia la luz del Sol, viejo... Te quiero.