Bitácora del Navegante. Pensares.

Creo que la Idea es completamente generosa: comparte su bonita virtud de eternidad inalcanzable, con cualquier cosa que querramos imaginar o desear.
La realidad es tán distinta... fugaz y concreta, pero valiente por fuerza: no se escapa: está ahí para ver que tál es, que tál la calificamos. Y aún así, está constantemente expuesta a los cambios, hasta al último, hasta el fin.
Considero dichosa una pareja de amigos, de amantes, que gustan de esa mezcla de belleza pasajera y eterna, y que -sin ignorar que el tiempo pasa- disfrutan lo bueno, soportan lo malo, y encuentran juntas sus miradas (nacidas de este espacio y este tiempo concretos) en aquel exquisito y lejano punto, que se pierde en la eternidad.