jueves, mayo 27, 2004

Bitácora del Navegante. Tintas.

Dulce encanto.


No sé si estuve enamorado,
pero te amé.
No quise hacerte daño,
pero lo hice.
No quiero recordar tus días,
pero te extraño.
Verde jardín de una única flor,
blanca, apenas brotada...
Podré perdonarme
que te hayan arrancado aún pimpollo
de esa forma tan vulgar?
...
No hay sol que llame a la flor.
No hay flor en el jardín arrasado.
No hay dulce encanto, en mis recuerdos.